¿Quieres dejar de fumar?

Viendo a los fumadores con sus cigarrillos siempre en la boca y con sus caras de satisfacción al encenderlos, e incluso escuchando algunos de sus comentarios con respecto a lo que les gusta fumar, se hace difícil pensar que quieran dejar el tabaco. Sin embargo al hablar con ellos, si no están intentando justificar su adicción, es frecuente que reconozcan que les gustaría dejar de fumar.

En realidad el deseo de abandonar el tabaco parece ser una cuestión cultural o de información. Al menos, en las sociedades más avanzadas se desarrollan masivas campañas y legislaciones contra el tabaco que acaban removiendo la mente del fumador  y haciendo que descienda el número de fumadores.

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Según datos publicados en MedlinePlus el mes de noviembre de 2011 sobre un informe publicado en Estados Unidos, alrededor del 20 por ciento de los estadounidenses siguen fumando. En España, según datos de la Encuesta Nacional de Salud de 2006, fuma el 30 % de los adultos mayores de 16 años. Esta cifra era del 36 % en 1997 y del 39 % en 1987. Estos datos dibujan un escenario en el que el desarrollo progresivo hace que descienda el consumo de tabaco.

En el informe norteamericano se indica que casi el 70 % de los fumadores querían abandonar el consumo, lo que pone de manifiesto que la impresión que se obtiene de la observación de los fumadores no es correcta. Seguramente este porcentaje es aún mayor, solo que el miedo a enfrentarse cara a cara con la adicción acobarda a muchos fumadores y deciden que prefieren seguir consumiendo tabaco.

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Además, según ese informe, más del 50 % de los fumadores intentaron abandonarlo en el año anterior. Esto parece demostrar claramente que es cierto que quieren dejar de fumar, ya que no solamente lo dicen sino que, además, lo intentan.

Otra cosa es que lo consigan. Ya hemos hablado sobre esto en otros artículos, la mayoría de fumadores que lo dejan lo hacen sin ayuda, por sus propios medios, pero el precio que pagan es alto pues, además de que suelen necesitar mayor número de intentos, es frecuente que les perdure la adicción psicológica, incluso para el resto de sus vidas.

Si quieres dejar de fumar, lo mejor es que te pongas en manos de un profesional y sigas un programa de tipo psicológico. Si es necesario, el especialista te indicará si has de tomar algún fármaco, pero los fármacos por sí solos no mejoran tus posibilidades de éxito, y mucho menos los productos que contienen nicotina.

Gracias por tu tiempo.

Luis Ángel Marqués.

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